Cómo cuidar tus dientes durante el embarazo
El cuidado dental es muy importante en todos los períodos de la vida. Sin embargo, cuidar tus dientes durante el embarazo es esencial en esta etapa. Durante la gestación se producen varios cambios en el organismo que alteran tu estado físico. Y sí, tu boca también también se altera.
Durante un embarazo se produce un aumento del flujo sanguíneo en el cuerpo, por lo que es más normal que se produzca gingivitis -sangrado de las encías-. Conforme pasen los meses de gestación será más probable que aparezca este problema.
Otra consideración es que se sube la cantidad de azúcar en muchos fluidos, incluyendo las secrecciones salivares. Esto causa un mayor desgaste del esmalte dental, ya que nuestra saliva es la que actúa como agente perjudicial.
En Centro Odontológico María José Manrique sabemos que durante el embarazo surgen ciertas dudas e inseguridades. Es normal que intentes proteger a tu bebé ante posibles peligros. Por eso mismo, nuestros profesionales odontólogos realizarán tus tratamientos dentales durante el embarazo con toda la atención y cuidados que te mereces.
Prevención: esencial para cuidar tus dientes durante el embarazo
Como hemos visto, durante el embarazo mantener una correcta salud bucodental se convierte en un asunto mucho más complejo. Por eso mismo, es necesario incrementar la atención y prevención, debido a que pueden surgir problemas posteriores a madre e hijo. Para llevar un correcto cuidado dental durante el embarazo, has de seguir los consejos que te proponemos en Centro Odontológico María José Manrique:
- Ten una correcta higiene bucodental. Normalmente, el cepillado dental es algo más que recomendable. Durante el embarazo es una tarea obligatoria que hacer tres veces al día. Cepillarse los dientes después de cada comida y ante de acostarse se vuelve ahora esencial. Para evitar la gingivitis -que recordemos es el sangrado de las encías-, los odontólogos recomiendan usar hilo dental.
- Evita productos azucarados. El consumo de alimentos con alto contenido en azúcar hace que se incremente el Ph de tu saliva, por lo que se vuelve más agresiva con tu esmalte dental. Bebidas carbonatadas, cítricos, dulces…
- Lleva una dieta sana y equilibrada. Tanto para los dientes como para cuidar el organismo entero durante el embarazo, llevar un correcto régimen de comidas es fundamental. Al estar embarazada, necesitas de nutrientes extra, y el bebé grandes dosis de vitaminas y proteínas para gestarse de forma correcta. Has de incluir en tu dieta vitaminas A y D, así como fósforo y calcio. Y si además haces de esta una costumbre para toda la vida, mejor para ti y tus hijos.
- Visita al dentista con frecuencia. Realizarte una revisión dental cada tres meses durante el embarazo le permitirá al odontólogo descubrir posibles problemas y prevenirlos antes de tiempo.
¿Debería realizarme un tratamiento dental durante mi embarazo?
Debemos considerar que durante el embarazo se puede efectuar cualquier intervención dental pero siempre bajo unos cuidados y atenciones especiales. Sin embargo, durante el primer trimestre de gestación se recomienda hacer solo tratamientos de urgencia. Esto es porque la formación del bebé se encuentra en un momento crítico: se está creando su corazón, su sistema nervioso, los órganos vitales…
A partir de los tres meses de gestación, es cuando se recomienda hacer las intervenciones que sean necesarias. El odontólogo usará un tipo especial de anestesia local que no perjudique al bebé, por lo que es el momento ideal para subsanar cualquier problema.
En las últimas fechas del embarazo no es recomendable someterse a una operación dental. Esto es debido a que la mujer puede estar incómoda al estar mucho tiempo en la silla de dentista. Sin embargo, sí pueden hacerse sin ningún problema tratamientos cortos (limpiezas, etc.) o de urgencia.
¿Es seguro someterse a un escáner durante el embarazo?
Un escáner de rayos X siempre va a generar radiación, ya que está diseñado para eso. Sin embargo, los escáneres dentales proporcionan unas dosis muy bajas comparados con los existentes en los hospitales y centros de salud. Para el bebé no supone peligro alguno, ya que el escáner no enfoca en ningún momento el abdomen sino el rostro o la mandíbula de la paciente.